Brandon Lee, D.P.M., Podología – Sistema de Salud de Mayo Clinic
El estatuto actual de Medicaid (Título XIX) cubre los servicios médicos, incluyendo en la mayoría de los casos la atención médica y quirúrgica del pie y el tobillo. Sin embargo, la definición de médico se limita a la atención prestada por un médico (MD) o un doctor en osteopatía (DO), tal como se define en 1861(r)(1) de la Ley de Seguridad Social (SSA).
Los servicios prestados por un doctor en medicina podiátrica (DPM) se consideran opcionales, a pesar de que los médicos podiátricos han sido educados, formados y autorizados para prestar los mismos servicios de atención al pie y al tobillo que los MD y los DO. Los doctores en medicina podológica han sido definidos en el estatuto de Medicare [1861(r)(3), SSA] como médicos durante más de 40 años y están cubiertos como proveedores en casi todos los demás programas federales de salud, incluyendo TRICARE, la Administración de Salud de Veteranos (VHA) y el Servicio de Salud Indígena.
La atención médica y quirúrgica esencial del pie y el tobillo está cubierta como prestación por los programas de Medicaid en los 50 estados y el Distrito de Columbia, pero no siempre está cubierta cuando la presta un médico podólogo. La ley actual limita efectivamente el acceso de los beneficiarios de Medicaid a los servicios de calidad y rentables que prestan los podólogos y discrimina el tipo de profesional médico autorizado que los pacientes de Medicaid podrían consultar para la atención del pie y el tobillo.
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(ii) Un psicólogo escolar licenciado o certificado, u otra persona licenciada o certificada con otro título que desempeñe la misma función que un psicólogo escolar en un entorno escolar, sólo para deficiencias de discapacidad intelectual, problemas de aprendizaje y funcionamiento intelectual límite;
(3) Optometrista con licencia para las deficiencias de los trastornos visuales, o la medición de la agudeza visual y los campos visuales solamente, dependiendo del ámbito de la práctica en el Estado en el que el optometrista ejerce;
(4) Podólogo titulado para deficiencias del pie, o del pie y el tobillo únicamente, según el Estado en el que ejerza el podólogo permita la práctica de la podología en el pie únicamente, o en el pie y el tobillo;
(5) Logopeda cualificado sólo para deficiencias del habla o del lenguaje. Para esta fuente, cualificado significa que el logopeda debe estar licenciado por la agencia estatal de licencias profesionales, o estar plenamente certificado por la agencia estatal de educación del Estado en el que ejerce, o poseer un Certificado de Competencia Clínica en Patología del Habla-Lenguaje de la Asociación Americana del Habla-Lenguaje-Audición;
Podólogos y podiatras – Yvette Mann Podiatry & Associates
Vivir con artrosis en los pies puede ser doloroso y agotador. Aunque los síntomas de la osteoartritis varían de un caso a otro, los más comunes incluyen daños dolorosos en las articulaciones, hinchazón, problemas para caminar, rigidez e incluso deformidad.
Dado que dependemos de nuestros pies para desplazarnos cada día, tener artrosis en los pies puede afectar a todos los aspectos de su vida, especialmente a su capacidad para trabajar y mantenerse. Se sabe que la inmovilidad, el desempleo y el dolor intenso provocan depresión y ansiedad adicionales.
Si tiene artrosis en los pies y ya no puede trabajar, es posible que tenga derecho a una ayuda económica a través del programa de discapacidad de la Seguridad Social. La siguiente información le ayudará a determinar si tiene derecho a las prestaciones por incapacidad y le permitirá comprender mejor cómo funciona el proceso de solicitud.
La Administración de la Seguridad Social (SSA) proporciona criterios médicos específicos para cada condición de incapacidad, incluida la artrosis. La SSA utiliza estos criterios para determinar si una persona está realmente incapacitada o no. Si su osteoartritis le ha causado una grave deformación ósea o articular, es probable que cumpla los requisitos médicos para recibir las prestaciones por incapacidad.
Diagnóstico nervioso de Baxter para el dolor de talón
(ii) Un psicólogo escolar licenciado o certificado, u otra persona licenciada o certificada con otro título que desempeñe la misma función que un psicólogo escolar en un entorno escolar, para deficiencias de discapacidad intelectual, problemas de aprendizaje y funcionamiento intelectual límite únicamente;
(3) Optometrista con licencia para las deficiencias de los trastornos visuales, o la medición de la agudeza visual y los campos visuales solamente, dependiendo del ámbito de la práctica en el Estado en el que el optometrista ejerce;
(4) Podólogo titulado para deficiencias del pie, o del pie y el tobillo únicamente, según el Estado en el que ejerza el podólogo permita la práctica de la podología en el pie únicamente, o en el pie y el tobillo;
(5) Logopeda cualificado sólo para deficiencias del habla o del lenguaje. Para esta fuente, cualificado significa que el logopeda debe estar licenciado por la agencia estatal de licencias profesionales, o estar plenamente certificado por la agencia estatal de educación del Estado en el que ejerce, o poseer un Certificado de Competencia Clínica en Patología del Habla-Lenguaje de la Asociación Americana del Habla-Lenguaje-Audición;
